Gremlins en Miraflores; once años de terror

“El que nunca ha tenido y llega a tener,
loco se ha de volver”
........................................Adagio popular

En febrero de 1999 pudimos observar, con estupefacción, como el candidato derrotado en la elección presidencial del año anterior, Salas Röemer, fue sometido a vejámenes y golpes cuando pretendió rendirle un homenaje al Libertador en la Plaza Bolívar de Caracas. Hoy no nos extraña este comportamiento, pero los venezolanos, incluyendo a un sector que apoya al gobierno, lo repudiamos.

Se ha hecho una constante la violencia desatada y demencial en cada aparición de un ejército de gremlins infundiendo temor, apoderándose de la propiedad de otros, destruyendo y haciendo de las suyas; filibusteros vestidos de rojo e imbuidos de impunidad.

Gremlins revolucionarios
Vivimos en un país dividido; somos una sociedad que se debate a si misma a sabiendas del error cometido. Las imágenes de un grupúsculo de violentos vestidos de rojo, suerte de sobrevenidos perversos que agreden la vida asistidos de una “licencia de corso”, a la que se creen con derecho. Algunos, descaradamente, van disfrazados de magistrados coreando “¡uh-ah Chávez no se va!”. Vaya pandilla; instrumentos de odio y resentimiento.
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Vimos, absortos y en vivo, como asesinaron a Maritza Ron. Asistimos a las trompadas propinadas a Gustavo Azocar por una violenta Iris Varela y abrímos los ojos ante una cruda realidad, que no terminamos de aceptar como nuestra realidad, al contar 16.047 homicidios en 2009. Recordamos la desaparición de Ciro Ángel Pedreañez, uno de los soldados de Fuerte Mara y la muerte de Evangelina Carrizo, ambos obra de militares, provocando tristeza e indefensión de sus familiares. A quién acudir, abandonados de justicia. Qué pasó en estos once años.

Antonio Chávez, hijo de Adán Chávez; socialismo en acción

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¡Palo abajo!
El rescate del país y sus instituciones se producirá más temprano que tarde. El sueño de la promesa, nunca satisfecha, se ha venido desmoronado paulatinamente. Quienes dudaban que les tocaría alguna vez van sintiendo en carne propia la inseguridad, la violencia y la mentira encarnada en el caudillo que solo nos ha pedido sacrificios para que su grupo de cercanos se atiborren de los beneficios que todos esperábamos, de la inmensa fortuna petrolera malversada que jamás podremos recuperar.

Mientras, la salud sigue amenazada y el descaro de tanto papelón y desvarío es tan grande como sus recules y el país se hunde absorto de estar en manos de un incapaz como jamás pensamos, un nervioso lunático que constitucionalmente deberá culminar su periodo en el 2012. El país se cae a pedazos, comprometido con las extravagancias de un don nadie que, tras autodenominarse “Tribilin”, se montó en un proyecto de desestabilización que a los venezolanos por poco nos cuesta el futuro y la paz de nuestra serena vida como nación. Venezuela se pudre en corrupción, terrorismo y rezago con el futuro.

Lo cierto es que un caudillo autoritario lleva al país a una lucha intestina y promueve la guerra al “capitalismo” provocando la desestabilización y atropellando al país del desarrollo. La participación masiva de los demócratas es necesaria y fundamental para la conciliación de un país que espera. Debemos activarnos en pro del rescate de la libertad y la reivindicación de la democracia como estandarte de la salud y la paz nacional.

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UNIDOS
SOMOS MAYORIA