domingo, 5 de octubre de 2008

Los Trapitos tras el Poder

Es innegable que los problemas de 1998 no sólo subsisten, sino que se han agravado hundiendo al país en el verdadero desastre que representa el fracaso del gobierno de Chávez y un encubridor y hambriento seudo socialismo, escatològico y fracasado.

Establecido por la palpable incapacidad para gobernar del propio Chávez y de sus colaboradores, nos atrevemos a decir que el “Proyecto” nunca estuvo signado sino por sus propias apetencias personalistas, que cualquier proyecto paralelo solo estará incluido detrás del verdadero, el depredador, el propio y particular y el de cada uno de los que tras los escritorios del poder se empeñan en asegurar su futuro, la satisfacción de su hambre y los múltiples destinos de maletín del siglo XXI.


La cordura y la sensatez están fuera de lo que un tranquilizante, o tal vez litio, ofrecería al equilibrio tras las apetencias del desafuero gubernamental.

Es al abuso evidente lo que se empeñan en defender. Se protegen y rodean de seguridad, preservando la ilegalidad y el Poder que ostentan, sin importar el daño patrimonial.

El día llegará... nada es eterno
La ambición en cada consulta es ganar a toda costa, asegurar la malversación, la estafa y el poder absoluto para garantizar una permanencia, de la cual es seguro su fracaso que desentrañará las ideas, jamás conocidas de un extraño socialismo del siglo XXI, en las cuales fundamentan un mal avenido “proceso”. Una mentira largamente sostenida.

Llegará el día cuando se caigan los disfraces, donde la justicia alcance su meta y las respuestas descubran su apariencia real, su desnudez. Llegarà el dìa cuando sus voces ablanden su estridencia y las insolencias y gritos no escupan el odio a si mismos y nos muestren su bravura, una valentía sui generis de facha bizarra y entonces, estoy segùro, recuerden que Dios existe.

Nada es eterno. Seguramente se abrazaran a una sotana para rogar y pedir misericordia.

¡Oh sì!, son una gènero fuera de serie... ¡uh-ah!

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