¡MANOS ARRIBA... lo quiero todo!
Venezuela es un país abusado. Los venezolanos hemos sido sometidos por el pillaje, un aparato rapaz y a la medida de su voracidad, se empeña en imponer el criterio de un gobierno autocrático, se aprovecha de sus funciones para condicionar al país a sus manejos inmorales para convertir la democracia en tiranía, terrorismo de Estado y corrupción legitimada.
La noticia es un hecho cotidiano. Los esfuerzos mediáticos, del partido de gobierno, para que la opinión pública no perciba la realidad nacional son de cumplimiento absoluto y acatamiento forzoso.
El tratamiento de cada ejemplo noticioso en el área de la información, es embestido y tratado de controlar por el sólido aparato represivo gubernamental. Expropiaciones, reformas forzosas legalizadas, presidio político, incitación al odio, malversación, desfalco a las arcas nacionales y financiamientos a otros países, devaluación monetaria, son parte de las sucesos que convendrían pasar desapercibidos sin sentirse. El país entero capta la huella del fraude cuando la normatíva es la trampa a la democracia. Ese país, está tomando notas... ¡sssh!
TibiSI y su Banda…
¡están pillaos!
La alteración de las circunscripciones electorales para las próximas elecciones parlamentarias del 26 de septiembre por parte del Consejo Nacional Electoral es muestra del terror que siente el bando totalitario, una maniobra malandra que ha producido cambios primordiales que afectan a la mitad de la población venezolana.
El ventajismo electoral instaurado desde el CNE, ha afectado 61 circunscripciones electorales nominales que concentran un importante porcentaje de la población han sido expresamente alterados con la finalidad de intentar ganar con menos votos, utilizado criterios diferentes para cada estado
La noticia para el CNE es que, no van a poder derrotar la decisión democrática, a pesar de los intentos desesperados que están detrás de esta desencajada medida. Deberán recordar entonces que los delitos de lesa humanidad no prescriben, y cada uno tiene responsabilidad individual y un expediente que corre con sus deudas. ¡No lo duden!
Algo los cría y ellos... delinquenObviar la devaluación de la moneda y que el país tenga la inflación más alta del continente y tal vez del mundo, o la colocación de un equipo electoral al servicio de los requerimientos y ventajismo del régimen, son pretensiones de un aparato que trabaja a la medida del poder hegemónico.
Los venezolanos no queremos, nunca más, una Asamblea de focas aplaudidoras. Necesitamos una representación institucional de valores ciudadanos en la cual nos sintamos representados. Estamos a las puertas de lograrlo y hartos de ser irrespetados.
Los venezolanos estamos resteados
La luz de la Nueva Venezuela está encendida
Vamos pa´lla
¡EL CAMBIO VA!
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