… ¡PENDEJOS!

"Venezuela no es un país inseguro,

sino que vive una sensación de inseguridad”
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxGabriela Ramírez

xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxDefensora del Pueblo

x

Llegue a la conclusión tardíamente, y aun a costa de negarlo, soy un pendejo. No te confundas, no soy nerd, ni tonto. En confianza, me gusta que las cosas lleven el camino correcto pues interpreto mi vida y la valoro como una experiencia única. No se equivoquen.

Los “pendejos” somos observadores. Nos insertamos sin ser advertidos, somos críticos y a veces resultamos incómodos por precisar lo que algunos pretenden ocultar.

Vivimos una época donde acciones violentas son generadas por grupos parapoliciales y hordas afectas al gobierno. Somos muchos los pendejos pidiendo que la “normalidad” regrese. También por eso somos pendejos.

x

No te puedes hacer el pendejo. Somos prójimos característicos, respetamos la Constitución, requerimos justicia y no violencia, somos esos venezolanos que aspiran un gobierno que brinde respeto al ciudadano, que no regale nuestro patrimonio, Queremos democracia, libertad de expresión, vivir en paz y volver a ser hermanos en un solo país.
x

Pero no nos subestimen, aún antes del comentario de Gabriela Ramírez, habíamos perdido la capacidad de asombro y acostumbrarnos a vivir boquiabiertos de estupor, desde el primer día. Tampoco no pedimos ser atropellados por individuos que abusan de su suerte. No se equivoquen.

x
Una “Marcha de pendejos” sería una manifestación multitudinaria para reencontrarnos alrededor del espíritu que Don Arturo Uslar forjara como propuesta a los venezolanos de bien. ¡La historia no juzga, se hace... pendejos!

X

x

Somos a los que un extraviado ha catalogado como escuálidos, esos que al protestar pacíficamente, y por derecho, tildan de guarimberos, pitiyanquis, burgueses, oligarcas o golpistas. A los que han despojado de sus tierras, robado la tranquilidad, malversado su patrimonio, exiliado y cometido fraude electoral. Esos que a lo largo de diez interminables años han ignorado, criminalizado, jugado sucio y llenado de vergüenza. Somos los que decididos a cambiar el panorama, no llevaremos más una cruz impuesta por autócratas ni pillos degenerados. Cuidado.

Somos los de manos limpias y mentalidad liberal, los que miran el futuro como una ocasión de desarrollo y no para convertirnos en parásitos producto del oportunismo con el que este ciclo oscuro ha tentado a los débiles. No equivoquen el rumbo y aguante del pueblo manso. Piénsenlo bien, y ni por un momento crean que jugamos al tonto. Estamos atentos al disparate sobrevenido.

En Venezuela la locura no es colectiva, si bien nos tildan de pendejos, estamos pendientes. No se equivoquen. La historia no se ha terminado…¡pendejos!

**x
Con respeto a la memoria y atribución

académica de Don Arturo Uslar Pietri